No importa si miento, siempre me creen, cuando mas miento adopto una nueva imagen ante los demás, soy pulcramente un mentiroso nato, ¿acaso no lo somos todos?, necesito confesar que he mentido a todos, solo soy la sombra de algo que siempre odie, siempre aborrecí, eso que soy hoy no me gusta. La vida me ha dado el camino y yo sin renegar lo he seguido sin detenerme, como un rio sigue su caudal, sin saber a dónde va, si caerá o se extinguirá. Las cosas se van dando buenas y malas, no importa todo tiene solución, mis gafas se han oscurecido y ya no puedo ver, los años pasan y las mentiras siguen, solo que hoy las mentiras tienen dulce, las mañanas son tan frías, las noches de igual manera, solo me tengo a mi y a nadie más, estoy feliz de no dañar a nadie, de ser solo una gárgola en la inmensidad del universo.
No importa si soy bueno o malo, las personas me han juzgado, me encanta ser juzgado, ser destrozado por algunas bocas que parlan y parlan, solo soy yo, solo soy nadie. Mi café se ha enfriado, necesito más. Le mentí a mis amigos cuando les dije que lo eran, también a mis novias cuando les dije que las amaba y tuve sexo con ellas, le mentí a medio mundo, menos a cinco personas, cuatro son de mi familia y la última es la única persona que le he podido contar cosas de mí, cosas reales, hasta en una charla por web me inspiro en un cuento tan raro…la considero mi amiga, espero no me este mintiendo como yo le he mentido a otras personas, ¿mi miedo es mi karma?, soy solo la sombra de un tipo escuálido y sin habilidades. No importa, hoy escribo porque tengo ganas de escupir algo, escupirme a mí mismo, escupir mis mentiras. Realmente las mentiras son la manera de hacer feliz a otra persona.
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